Al llegar a nuestro centro, evaluaremos el estado en que llega su mascota, y en base a ello, antes de nada procederemos a realizar la estabilización de sus constantes vitales
Este proceso puede incluir,(no siempre) el control de la temperatura, el pulso y la frecuencia respiratoria, así como analizar el nivel de consciencia de la mascota(clasificándola según la profundidad, en alerta, depresión, estupor y estado de coma).
Posteriormente , si fuese necesario, procederíamos a realizar una analítica sanguínea y a medir la presión arterial, colocando posteriormente un catéter intravenoso,para administrar fluidoterápia intravenosa, y estabilizar así el grado de deshidratación de la mascota.
Si el paciente llegase con Insuficiencia respiratoria o hipovolémico, le suministraríamos Oxigenoterapia con mascarilla, intranasal, o mediante intubación traqueal.
Un aspecto muy importante, que siempre tendremos inmediatamente en cuenta, es administrar un tratamiento analgésico, para minimizar el dolor de la mascota.
En casos extremadamente graves, en los que la mascota llega totalmente descompensada y en estado de Shock Cardiogénico, procederíamos a realizarle una Reanimación Cerebro-Cardio-Pulmonar(RCCP)
Ya una vez estabilizado el animal, procederíamos a realizar la anamnesis y la historia clínica del paciente, pero habiéndonos asegurado antes, que ya se encuentra estabilizado. Es muy recomendable, que lleve siempre la cartilla sanitaria de vacunación.